La interfaz, llamada BrainNet, combina la electroencefalografía (EEG) para registrar las señales cerebrales y la estimulación magnética transcraneal (TMS) para transmitir información de forma no invasiva a otros cerebros.
A través de la EEG, el sistema registra los impulsos eléctricos indicativos de la actividad cerebral y a través de la TMS las neuronas son estimuladas con la ayuda de campos magnéticos.
Según sus creadores, que anuncian los resultados en Arxiv, el archivo on line para la prepublicación de artículos científicos, esta interfaz puede potencialmente conectar a muchos cerebros, incluso a través de Internet.
Jugando al Tetris
La interfaz se ha desarrollado mediante un sistema de puzles parecidos al juego conocido como Tetris. Durante el experimento, dos de los participantes, llamados expedidores de señales neuronales (pensamientos), debían decidir qué partes del puzle debían rotar.
Una vez tomada su decisión, debían transmitirla mirando a una de las dos señales luminosas situadas a cada lado de la pantalla. Cada una de esas señales parpadea a diferentes frecuencias, una a 15 Hz y otra a 17Hz. Mirar a una o a otra supone decidir qué hacer con el puzle del juego.
La señal escogida emite su señal correspondiente hacia el cerebro del expedidor, que el EEG capta. A continuación, una cápsula TMS genera flashes de luz en el cerebro del receptor, que de esta forma interpreta y hace cumplir en el juego la decisión tomada por el expedidor.
El experimento se realizó con cinco grupos diferentes de personas y alcanzó una precisión del 82,15%, lo que estos investigadores consideran un resultado alentador, tratándose de un primer ensayo.
Fuente: Tendencias 21